Baja de peso controlando tus emociones.

Según una encuesta realizada en EEUU en 2013 por Consumer Reports National Research Center en colaboración con la Asociación americana de Psicología (APA), las emociones parecen ser el principal obstáculo a la hora de perder peso, al menos eso es lo que piensan los psicólogos expertos que fueron consultados para esta investigación.

Estos expertos prestaron atención al papel que juegan las emociones en la ganancia y pérdida de peso.

  En la encuesta realizada a 1328 Psicólogos sobre las estrategias que consideraban esenciales a la hora de plantearse una pérdida de peso, encontraron 4 estrategias que garantizan no recuperarlo a corto o mediano plazo, y estas son:

1.- La comprensión, el manejo de los comportamientos y las emociones. Con un 44 por ciento juega un papel esencial el ser comprensivo contigo, y no forzarte a hacer cosas radicales, tener fuerza de voluntad sin caer en medidas extremas, conocerte y saber tus alcances ayudara a no caer en la frustración.

2.-  El comer emocional. Con un 43 por ciento, este se considera una barrera importante para la pérdida de peso, analiza si tu hambre es por ansiedad, o por alguna emoción que tengas encima y quieras lidiar con ella con los alimentos.

3.- Mantener una rutina regular de ejercicio físico es necesario para nuestro cuerpo, con un 43 por ciento.

4.- Elije alimentos adecuados. Con un 28 por ciento  es vital para poder perder peso.

 En general, mejorar el autocontrol sobre los comportamientos y las emociones relacionadas con la alimentación es clave, lo que indica que las dos variables van unidas. El 92 por ciento de los encuestados consideraba que tener en cuenta los problemas emocionales evidentes relacionados con el aumento de peso proporcionaba a sus clientes una gran ayuda.

Sin embargo, más del 70 por ciento identificó la terapia cognitivo-conductual, la resolución de problemas y el Mindfulness (atención plena) como estrategias de pérdida de peso “buenas” o “excelentes”. Además, las estrategias motivacionales, los registros de comportamiento y la fijación de objetivos también fueron importantes para ayudar a los clientes a perder peso y no recuperarlo posteriormente.

“Cualquiera que haya tratado de perder algunos kilos y mantener esta pérdida de peso durante algún tiempo sabe que hacerlo no es fácil. La buena noticia es que la investigación y la experiencia clínica han demostrado que, además de los enfoques conductuales, la terapia cognitivo-conductual que se dirige a las barreras emocionales ayuda a las personas a perder peso“, comentó Norman B. Anderson, CEO en APA y colaborador en el diseño del estudio.


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